Diario de LoiVanilla, 25 oct. 15

Mañana tengo que ir a la nutricionista y la verdad, es que me gustaría preguntarle qué la llevó a estudiar nutrición. Me refiero si fue a que tuvo un familiar y vivió de cerca la 'enfermedad' o quizás es una ex gorda.

Más que nada, por el mal trato y la poca contención que le brindan a una paciente obesa. Se nota que preparan una dieta y te la dan sin más, y que, si no la seguís al pie de la letra y encima!, tenés el valor para contar dónde la rompiste ya te juzgan.

Estas nutricionistas no entienden una goma de lo que es ser obeso. Sí pueden saber qué es lo que es más conveniente para mí, porque para eso estudiaron. Pero realmente, tienen cero tacto. No comprenden, no se pueden poner en el lugar del otro. Siempre, al menos yo, tomé a mi obesidad como una adicción a la comida; pero esa gente no entiende nada de adicciones, o de boicotearse a sí mismo.

Hay nutricionistas que dan dietas para enfermedades particulares o para atletas, que son como por así decirlo, dietas de manual. Por ejemplo, cuando tuve problemas de vesícula me prohibieron ciertos alimentos y bebidas, y está perfecto, porque de última, si no cumplía con algo de eso, me dolía (y adivinen de quién era el problema? sí!, mio)

''Ya tenemos 1500 operaciones realizadas, y escuchamos miles de excusas ya y sabemos cómo funciona el cerebro de un obeso''. OH, TODO MUY LINDO LO QUE ACABÁS DE DECIR, PERO DE 'ENTENDER' NI HABLAR, NO?

No digo que deba ser así, pero una persona que fue flaca toda su vida o no tuvo contacto durante muchos años (antes de empezar a estudiar) con una persona obesa o con sobrepeso, no debería bajo ningún punto, asesorarla. O sí, pero sin juzgarla, porque ante todo, comer mucho es una adicción y las adicciones con retos no se superan.